SIn DÁdivas
buscando desesperadamente
la respuesta al por qué?
a una situación irremediable
Presa, en la quietud de los días
y la indiferencia del mundo,
que atropellaban su dignidad
lo único que conservaba
cuidadosamente arreglada por el destino
cada roce, cada beso,
cada instante de locura.
Se dejó arrastrar por el placer
y la desnudez de los cuerpos,
se deshinibió a más no poder
y sin protección vivíó cada segundo.
de noches sin dormir
de días sin soñar
de un mañana sin futuro.
Gabriel S. Delgado C.
Ya está listo el cuento desencantado que sigue, pronto será publicado, mañana el especial número 7, saludos a todos los bloggers.
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